martes, enero 25, 2005

Conservar en lugar fresco y seco

Gracias al nuevo periodismo hemos pasado de dividir el año climatológico en 4 estaciones a dividirlo en 2 eventos: ola de frío y ola de calor.
Nos hemos amariconado de tal manera que pasar de 30 grados es ola de calor y bajar de los 0 ola de frío.
Si a todo ésto le añadimos un viento polar, el resultado es igual al comienzo de la cuarta glaciación, las fuentes darán cubitos de hielo, todo el que no tenga la calefacción de Gas Natural morirá de frío sin remedio.
Recuerdo mis tiempos de repartidor en el Caprabo, episodio breve pero feliz y plagado de anécdotas. Entré a trabajar en octubre y me fui en septiembre, por lo que sufrí los rigores del invierno y los calores del verano. Quizá porque con 18 años no te duele nada, te atreves a salir bajo una intensa lluvia, con un chubasquero que te empapa los pantalones y la espalda al no transpirar. Yo repartía con grados bajo cero y con los extintos termómetros callejeros marcando los 40 principales en verano. Y lo siento por el INM, pero no me pasó nada.
Hicieron bien en quitar aquellos termómetros, porque parte del frío que tenemos es debido a ellos. Si ésta mañana yo hubiese salido a la calle y en vez de leer un grado hubese leído doce piensas: "joder, pues tampoco hace tanto frío, debe ser el viento y la sensación térmica o el efecto foehn del que tanto habla Lau".

Volviendo a dar caña a los informativos, sus noticias están tan vistas y repetidas que podría inventarme un programa de ordenador que generase informativos según la época del año. Escribimos "ola de frío" y le damos al botón de "Generar noticia estúpida".
La pantalla nos devuelve ésto:
Una ola de frío polar barrerá la península de norte a sur a partir de mañana: A ver cuando viene una ola del polo sur que la barra de sur a norte.

Las temperaturas sufriran un descenso brusco y en zonas montañosas podran darse precipitaciones de nieve.

Protección civil activó anoche el plan de emergencias invernales y ha recomendado a la población abrigarse y ,a ser posible, no salir de casa: No voy a currar, que lo ha dicho protección civil. Esto es como cuando hay mucho viento, que no se puede andar cerca de fachadas, vamos que lo mejor es salirse de la ciudad.

Cientos de máquinas quitanieves están preparadas para el temporal, que se espera remita en unos 5 días. Asimismo, se han comprobado las reservas de los silos de sal: ¿Qué harán los de las quitanieves cuando no nieve? ¿Tendremos dentro de unos años manifestaciones contra el cierre de los silos?

La dirección general de tráfico recomienda no usar el coche. Si no queda más remedio habrá que llevar frutos secos, una manta, el deposito lleno y una botellita de Absolut de emergencia, así como las cadenas, el gato, el chaleco, los triángulos y el disco del Chivi. Si usted se ve atrapado en la tormenta ponga el disco del pornoautor y salga de vehículo. Coloque los triángulos en el techo y las cadenas en las ruedas. Levante el coche con el gato y métase debajo. Tápese con la manta, poniéndose el chaleco. Saque el absolut, sirvalo con hielo y con unos alcahueses y espere a que escampe.

Y es que, a éste paso, a los españoles nos pondrán en el DNI: "Conservar en lugar fresco y seco"

lunes, enero 17, 2005

44 días sin llover

...y los embalses al 60% de su capacidad en pleno mes de Enero.
No es la falta de lluvia lo que me preocupa, sino lo rapidamente que esta cambiando el clima en los últimos años. Se que a lo mejor éste verano tengamos litros y litros de lluvias torrenciales, pero todo es muy extremo: el calor, las lluvias, las épocas sin llover.
La Tierra se está quejando de algo y nos negamos a oirlo, nos negamos a cesar en la emisión de gases contaminantes, a desarrollar energías limpias, renovables y económicas como el hidrógeno pero no nos negamos a las comodidades, a tener la calefacción puesta con las ventanas abiertas, a bañarnos en vez de ducharnos.
Lo que más jode de todo ésto es que la sensación de impotencia que tengo al no poder hacer nada, al sentirme arrastrado por la mayoría a gastar más gasolina, a no reciclar, a ser cabrón con el medio ambiente.
Mi propósito para éste año no es ser mejor, más ecologista que el 2004 sino seguir siendo igual, aunque me lo pongan difícil. No es mala idea reinvertir lo que me gastaba en Absolut en renovar otro año más como socio de Adena/WWF. Seguro que ellos si que pueden hacer algo.

Comienza la campaña verde 2005:
Limpia - Recicla - Respira

miércoles, enero 12, 2005

Redacción: El gimnasio

El gimnasio es donde van las mujeres a adelgazar y los hombres a ponerse cachas.
Despues de las navidades, mucha gente se apunta al gimnasio, porque han hecho promesas de que para éste año van a perder unos kilos.
La primera fase está superada: quieren apuntarse.
Hay un tiempo variable entre la fase uno y la fase dos,apuntarse, que nunca es inferior a un mes. Conviene mentalizarse y complementarlo con otras actividades: voy a beber menos cerveza, voy a comer ensaladas.
Cuando por fin te plantas en la puerta del gimnasio de tu barrio te sientes orgulloso de ti mismo, abres la puerta con decisión, aún no has entrado y ya te sientes más fuerte.
El monitor, culturista frustrado o pedazo de carne vuelta y vuelta en los rayos UVA te recibe con una sonrisa.
Saludo 1(Cuerpo escombro): Hola, que venía a ponerme fuerte
Saludo 2(Panceta & Birra): Buenas, vengo a ver si bajamos los michelines.
Saludo 3(Enteradillo): Que hay. Na, a echarle un vistazo a las máquinas que tenéis y eso

Despues, el paseillo, en el que no podrás evitar ser el centro de todas las miradas, incluida la del gordito empapado en sudor. Metes tripa, intentando aparentar que tampoco lo necesitas tanto. Te encuentras al único vecino al que no has saludado ni en el ascensor y decides que te pegarás a él como una lapa durante los próximos 20 años, porque tu vas a estar en el gimnasio toda la vida. Hay que mantenerse en forma.Te pillas una oferta en la que yendo un año te regalan 2 meses, encima es más barato de lo que pensabas.

El monitor te sugiere que no empieces muy fuerte. ¡Envidioso! Lo que no quiere es que me ponga tan cachas como él, y encima sin esteroides. Pues se va a cagar, hombre, con las ganas que traigo yo.
Y pimpampimpam, otra pesita, diez abdominales más, si resulta que tampoco estoy tan fuera de forma.Así, que duela, si no duele y no sudo es como si no hiciese nada.
Te subes en la bici estática y es donde realmente tocas fondo. Normal que los ciclistas se dopen, estás destrozado y no te has movido del sitio...

Se acabó por hoy, me voy a la ducha con mi toallita nueva. Nada de mariconadas, los demás que se paseen en pelotas si quieren, pero a mí los huevos solo me los ve mi mujer.
Puff, que bien sienta el agua cayendo sobre los hombros.
Te sientes realizado, como si acabaras de salvar el mundo y te tomaras un merecido descanso.

Te vistes y sales del gimnasio sonriendo: ¡Hasta mañana! Mañana más, estoy encantadísimo, me noto más ligero, más flexible, más fuerte.
Iba a cenar un bocata de bacon y queso, pero tengo que cuidarme, así que me voy a preparar una ensaladita de atún, que me ha dicho un compañero que tiene proteínas.Algo tiene que tener, pero no llena nada, así que me voy a comer el bocata. De todas formas, me lo puedo permitir porque hoy lo he quemado.
Despues de comentar los pormenores de la primera jornada, como el primer día de colegio decides irte a dormir. El descanso tambien es importante tras una fuerte actividad física.


Debes ser sonámbulo, debes haber salido de copas sin enterarte porque al día siguiente no hay Dios que te levante de la cama de fakir en la que duermes.
Todo son pinchazos, te levantas a duras penas y cojeas.
Recuerdas por un instante las sugerencias del monitor. Su puta madre, como lo sabía el cabrón.
Vas a trabajar arrastrándote, como si te hubieran sacado las entrañas, las hubieran molido a palos y te las hubieran vuelto a meter. Encima te pesas y has cogido 200 gramos.
No podrán conmigo, mi determinación es más grande que todo ésto. Esta tarde volveré al gimnasio.

Despues de cagar te vuelves a pesar, 400 gramos menos. ¡¡Bien!! Esto comienza a hacer efecto. Estoy deseando volver a aquel sitio con olor a humedad, volver a saludar a mis compañeros de palizas.
Al rato de llegar decides tomártelo con más calma, no por tí, que estás decidido a comerte el mundo , sino por las agujetas, mejor será esperar a que se pasen.

Llevas dos semanas en el gimnasio y no ha habido día que te levantases sin dolores.
Hoy hay partido de la Champions, así que vas a hacer una jornada de descanso.
Quedas en el bar con los amigos y entre caña y caña les comentas con orgullo que te has metido al gimnasio.

Ayer llegaste a casa a las 5 de la mañana y ésta noche te acostarás pronto. Es mejor no entrenar cansado porque solo puede conducir a lesiones, pero mañana retomas la actividad. Bueno, mañana es viernes y los viernes sales a tomar algo, pero el lunes sin falta.


Han pasado 2 meses desde que te apuntaste al gimnasio, las agujetas han desaparecido.
Crees que deberías ir a darte de baja pero que más da, aunque no tengas ganas de volver a ir pagaste un año, así que ya te pasarás con más calma.
Lo del gimnasio no funcionó, ahora pesas kilo y medio más y no has conseguido nada.
Seguro que para eso hay que tomar hormonas y pastillas y tu por ahí no pasas.

lunes, enero 10, 2005

Cosas del fútbol

El Atleti perdió ayer 0-3 contra el Madrid.
A pesar de que la paliza sobre el campo se la diéramos nosotros la gente no recordará nuestras 17 ocasiones de gol sino sus 3 ocasiones. Le cogeré la frase al madridista Di Stefano para admitir que
Jugamos como nunca, perdimos como siempre.

En cambio, éste fin de semana tuve otra alegría: Volvimos a ganar en la liga de fútbol 7 y seguimos estando en la lucha por el primer puesto al terminar la primera vuelta. Hemos aprendido muchas cosas, entre ellas que jugamos mejor cuántos menos somos y cuánto mejor es el equipo con el que nos enfrentamos. Veremos que tal se nos da la segunda vuelta y si seguimos teniendo la suerte que se nos negó en aquel empate a 2 contra Dyc, si podemos seguir ganando partidos aún sin tener un delantero nato.

Cosas del fútbol, el sábado alegría, y el domingo tristeza...

Cortos días, largas jornadas

El principal inconveniente de hacer las cosas rápido es que se termina pronto y te queda tiempo para contemplar, para pensar, mientras otros siguen haciendo su trabajo. Los años me han sentado mal y me ha dado por hacer de mis días uno de esos odiosos capítulos de teleseries en los que se recuerda, entre bordes borrosos, los mejores episodios. Me siento obligado, como los periódicos, a sacar un especial de tropecientasmil páginas a color resumiendo mi vida.
El resultado es que me paso las horas de asueto entre tarea y tarea pensando en Lau, y cuando me canso de echarla de menos me pongo a rebuscar en mi pasado, reciente o lejano, intentando encontrar algún recuerdo que saborear, como un buen solomillo a la parrila.
Cuando estoy con ella no pienso en el pasado, y quizá tiemblo si me aventuro a pensar en el futuro. Trato de disfrutar del presente a su lado y, siendo tan feliz, me da por viajar hasta el futuro de nuevo, hasta esa fecha que se acerca como un coche sin frenos a un precipicio. Lau tendrá que irse, y si se que cada día soy más feliz a su lado tambien se que más daño me hará perderla de repente.

Los cielos despejados están contaminando Madrid. Me encanta el sol, no lo cambiaría por nada, pero se que cuánto más disfrute de sus rayos, menos aire respirarán mis pulmones.

Los días de invierno son cortos, pero pasan tan rápido como las largas tardes de verano. Como aquellas en las que nos conocimos.
Mi condenado futuro pende de un hilo de esperanza...
¿Y si no se fuera? ¿Y si se quedase conmigo para siempre?

martes, enero 04, 2005

Feliz y contento 2005

En lugar de estar escribiendo debería estar haciendo páginas, pero aún no ha pasado una hora desde que me fuí a comer, así que respetaré los horarios.
Hoy he vuelto a trabajar en un cliente, para ser más exactos en el único cliente al que he ido en los últimos meses. Las páginas, despues de años de experiencia, salen como churros. Es sólo coger un poco de aquí, otro poco de allá y listo. Cuándo se sabe hacer el trabajo se tarda mucho menos.

El año ha empezado como acabó el anterior, tranquilo, sin excesos y apenas sin enterarme. Han pasado otras navidades sin ilusión, pero aún tengo que tragarme los atascos cercanos a los centros comerciales. Eso es lo que han significado para mí: aglomeraciones, mucho de todo y poca tranquilidad.
Menos mal que he cogido la buena costumbre de pasar la Nochevieja en la sierra y puedo sentarme a mirar las estrellas que no pueden verse en Madrid. Este año fuimos a Buitrago, al polideportivo. Teniendo en cuenta que no se le puede pedir mucho al pueblo con las fiestas más aburridas del valle del Lozoya diré que no me lo pasé mal. Fuimos Raquel, Cristina, Victor, Laura y yo. Laura estaba guapísima, lucía un vestido que hizo volar mi imaginación lo que no pudieron volar mis piernas en la San Silvestre, 4 minutos más que el año pasado.
El domingo fuimos a montar a caballo y, como hay quien dice que los madrileños no nos caemos sino que nos tiramos, decidí tirarme del caballo que me llevaba, afortunadamente sin consecuencias.

Si tuviera que pedirle algo al nuevo año, sería sin duda poder seguir viendo las estrellas con las mismas personas, pero desde distintos sitios.