martes, septiembre 21, 2004

Resaca

El cuerpo humano es un hijoputa. Somos una mierda, totalmente imperfectos. Los animales se empapan, van descalzos, comen porquerías (cuando comen algo). Pero nosotros no, nosotros somos señoritos acostumbrados a las comodidades, cada vez más endebles y enfermizos. Eso y que las porquerías que comemos no envidian en nada a las de los animales. Hay cosas que solo pasan en las películas.
"Estoy entrenado para ignorar el dolor, las condiciones climatologicas,
vivir lo que da la tierra, comer cosas que harian vomitar a una cabra"
Bueno, pues yo no soy Rambo. Y llevo desde el sábado mosqueado por mi estado de salud. No se si es que duermo poco, me estoy haciendo viejo o realmente vivo en un estado de resaca constante causado por el déficit del alcohol en sangre.
La boda de Antonio fue original y preciosa. Nunca había visto ni oido hablar de una boda medieval que no fuese en tiempos de los Reyes Católicos. Dejé el coche en Coslada tras dejar en tierra en plaza Castilla a las tres marujas que llegaron tarde. Luego cogimos un autobús que nos llevó hasta el fin del mundo y luego girando a la izquierda. Yo que creía que Talamanca estaba más cerca...
Tardamos una hora en llegar. El novio ya estaba allí, logicamente como un flan.
Nos llevaron a un jardincito con sillas, decorado a la americana, con su alfombra roja y todo. La novia tambien tardó en llegar, pero poco teniendo en cuenta que la boda era en los confines del universo. Mu guapa ella, con una enorme trenza roja y un traje precioso, de cuento de hadas.
La ceremonia fue muy lírica, con poemas y rimas. Genuína hasta en eso. Despues de un pequeño aperitivo en el jardín pasamos al comedor.
A lo largo de la cena entraban los actores medievales a hacer demostraciones de danzas antiguas, malabares, humor o peleas. Lo mejor para distraerse entre plato y plato. Por cierto, como no comí salmón me comí 3 entrecots, por mi y por todos mis compañeros.
En la barra libre no hubo Absolut, así que decidí no beber alcohol. Además, supuestamente a las 3 volveríamos y tendría que conducir hasta Madrid. Hasta la una estuve un rato en la capea, otro detallito del novio. Las vaquillas eran pequeñas, pero sabían más que muchos catedráticos.
Y despues... pues nada, allí hablando, pasando las horas.... Al final acabamos a las 5, cogimos el autobús, recorrimos todas las carreteras de la Comunidad y por fin llegamos a Coslada. Luego, medio dormido, me lié con los desvíos y recorrimos todas las calles de Madrid, hasta llegar a Cibeles. Menos mal que desde ahí no tiene pérdida. La flipada fue ir sin pillar ningún semáforo en rojo desde Gregorio Marañón hasta Plaza Castilla. Grande, grande...
El domingo había quedado para comer con el primo David de Barco, la Prima Vane y la copilota Rose. Fuimos al Topolino, buffet libre que está por Callao / Santo Domingo. Y yo cansao, con la cabeza embotada, como si tuviese resaca vamos.
Me eché la siesta hasta las siete y quedé con Laura tranquilamente en vez de ir al mogollón de la fiesta del PCE. Seguramente la Vane aprovecharía mejor mis entradas.
Ayer fue un lunes peculiar, amanecí pronto y cansado. Cuando por la tarde fuí a buscar a Laura a la autoescuela la M-30 lucía un expléndido atasco desde la M-40 Norte por lo menos. Solución: Dar el rodeo aunque tarde lo mismo.
Llego a casa, ceno y a las 0.30 a dormir. O eso creía. A las 3 me desperté por el dolor de cabeza. Un dolor tremendo, de los que son peores cuánto más piensas en ellos. Me tomé todo lo que tenía a mano, pero hasta las 4 no pude dormirme.
Y hoy estoy cansado, ésta mañana aún me dolía un poco la cabeza. Madrugar es malo y hoy me ha costado trabajo levantarme como hace tiempo no me costaba. Estoy cansado.
El cuerpo humano es un hijoputa y hoy no me conecto al messenger, que me lío.

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