miércoles, marzo 28, 2007

La chica de la mesa de detrás


Me miras, te miro

clavas tus ojos y esbozas una sonrisa

yo tambien sonrío

y esos instantes hablan por si solos.

Vuelves a pasar y me dedicas otra mirada

coqueteando.

Como dos quinceañeros

no nos decimos nada, de momento.

Te veo todos los días y no se como te llamas

ni puedo preguntártelo aunque me gustaría.

Pero se que acabaré hablando contigo

lo que tenga que pasar, pasará

y espero que tus ojos no mientan.


Y si mienten... fue bonito compartir esa ilusión

y ver tus ojos clavados en los míos

como si no hubiera nada más sobre la Tierra.

No hay comentarios: